Las piezas expuestas en colaboración con la Diputación de Badajoz nos acercan en esta ocasión a comarca Tierra de Mérida-Vegas Bajas.
El “pie de altar” es una columna que sostenía la mesa del altar para celebrar la eucaristía, procede de Mérida y nos sitúa en el siglo VI. Se trata, por tanto, de una de las piezas artísticas cristianas más antiguas propias de nuestro territorio y que actualmente se encuentran en un templo. Una obra de arte de casi mil quinientos años.
Este tipo de pie, realizado en mármol y bellamente labrado, estaba pensado para ser el único o el principal soporte del altar y fue característico del territorio visigodo que se encontraba bajo la influencia de Mérida y Toledo. Procede de la actual Concatedral de Santa María, edificio comenzado a construir en el siglo XIII sobre los restos de la primitiva catedral paleocristiana. En aquel momento la iglesia emeritense, capital eclesiástica de Lusitania, destacaba en la España visigoda por la grandeza de sus obispos y por la devoción a la mártir Santa Eulalia.
El Museo de Bellas Artes de Badajoz aporta al programa la obra de José Amador Purificación, natural de Talavera la Real, Éxtasis maternal. Se trata de una pintura academicista realizada en 1960 que consigue plasmar y trasmitir perfectamente el cariño, la ternura y el amor de una madre por su hijo dentro del espacio del hogar. En ella destacan los volúmenes rotundos de las figuras y las líneas del dibujo muy marcadas además del punto de vista ligeramente picado.
Piezas invitadas en el mes de Octubre
Pie de altar visigodo Siglo VI
Mármol blanco con vetas grises
92x38x36cm
Concatedral de Santa María
(Mérida)
Éxtasis maternal
José Amador Purificación (Talavera la Real, 1908-1994)
1960
Óleo sobre lienzo
108 x 85 cm.