La Aparecida es una magnífica talla de María sedente con el Niño, de madera, estofada y policromada, titular primitiva del Santuario de Nuestra Señora de la Hermosa en Fuente de Cantos.
La rígida figura de María sostiene una flor en la mano derecha, mientras la izquierda se aproxima para sujetar al Niño, situado sobre su pierna, que acoge una paloma al tiempo que bendice con la diestra. La naturalidad de la forma del vestido de María y el ligero giro del cuerpo del Niño suponen un avance significativo frente al hieratismo radical de representaciones anteriores y sugieren que su autoría pudo estar en los finales del siglo XIV.
A finales del siglo XV los visitadores de la Orden de Santiago quedan constancia que la imagen estaba vestida, tras haber separado el Niño del cuerpo de la Virgen y desarticulada la mano derecha. Estos mismos visitadores mandaron en 1576 ensamblar todos los elementos originales de la imagen para que luciera como en su origen.
El Museo de Bellas Artes de Badajoz presenta Autorretrato, una pintura de José Pérez Jiménez (1887-1967), natural de Segura de León (Badajoz). Se inició en la pintura con Eugenio Hermoso pero finalmente su dedicación casi permanente fue la docencia que desempeñó en la ciudad de Oviedo.
Su obra se adscribe al academicismo tradicional de nuestro país y al regionalismo extremeño del primer cuarto del siglo XX, donde el retrato ocupó una parte importante de su trabajo, destacando algunos como el presente, de forma ovalada, con el fondo neutro y apareciendo su propio cuerpo con cierta rigidez.
La Aparecida
Autor desconocido
Finales del siglo XIV
Madera tallada, estofada y policromada
130x38x30cm.
Santuario Nuestra Señora de la Hermosa (Fuente de Cantos)
Autorretrato
José Pérez Jiménez
Sin fecha
Óleo sobre lienzo
61 cm diámetro
Badajoz. Museo de Bellas Artes